¿Cómo sacarle el máximo partido a tu pasarela de pago online?

La pregunta qué es una pasarela de pago es una de las más repetidas. Esta herramienta también se conoce como pasarela de pago TPV. Consiste en un programa que permite al cliente abonar su pedido introduciendo los datos de su tarjeta de crédito o débito u otras alternativas.

El software de una pasarela de pago para una tienda online establece una conexión entre el cliente, el negocio y el banco. Toda la información queda cifrada gracias a un protocolo específico. Las pasarelas de pago online funcionan gracias a un número de comercio que facilita el banco al que se le contrata este servicio.

En español se usa también la expresión TPV virtual al ser muy parecidas a los terminales de punto de venta que se encuentran en cualquier establecimiento. Es esencial destacar que la principal función de una pasarela de pago web es gestionar mejor el momento de la compra. Ya que es la encargada de enviar la notificación correspondiente a las tres partes implicadas. Así, una pasarela de pago e-commerce se caracteriza por:

Es bastante habitual buscar la pasarela bancaria que ofrezca un tipo de interés bajo e instalar la más económica. Lo negativo de esta decisión es que no se tienen en cuenta los métodos de pago que van más allá de la tarjeta de crédito. Esto puede provocar que el cliente decida no adquirir el producto o servicio determinado.

Desgraciadamente, los bancos se limitan a enviar el número correspondiente y no tanto a revisar la funcionalidad del servicio de pasarela de pago que ofrecen. Sin embargo, es conveniente revisar los siguientes factores detenidamente antes de elegir una alternativa.

Han de incluir procesadores actualizados y discos duros SSD. El objetivo es evitar que un problema en el servidor termine por impedir el pago y por provocar la pérdida de clientes en fechas claves para la facturación. El servidor debe cumplir con la normativa de seguridad PCI DSS.

Una pasarela de pago segura debe usar SSL para garantizar el cifrado de las comunicaciones y proteger los datos usados en la transacción.

Enviar enlaces o correos electrónicos para el pago, permitir que se abone el pedido por SMS o añadir botones de pago a la web son un complemento que invita a la conversión.

La inclusión de medidas de protección para evitar el robo de los datos bancarios de los clientes es imprescindible. De lo contrario, podría incurrirse en el incumplimiento de la Ley orgánica de protección de datos, lo que conlleva sanciones económicas. Sirva como ejemplo la eficacia del sistema AVS que se encarga de verificar la dirección fiscal de la tarjeta para confirmar que la utilizada es propiedad del cliente.

Han de revisarse muy bien las condiciones que pone el banco en estos casos. Debería elegirse la opción que defienda mejor los intereses del vendedor.

Un comercio en internet está siempre abierto, de modo que puedan surgir problemas en cualquier momento. Es importante saber qué tipo de asistencia ofrece el sistema. Además de cuál será el tiempo de respuesta para minimizar las consecuencias de los errores técnicos que pudieran surgir.

Abrir un comercio electrónico en la red no ha de limitar su adquirencia a su país de origen. Facilitarles el pago a clientes de otros países cambiando de divisa automáticamente e incluyendo más opciones para el abono del pedido es un requisito de vital importancia para la internacionalización del negocio.

En algunos casos, cuando el cliente va a abonar su pedido se encuentra con gastos extra que el banco añade por el pago en otra moneda o por cualquier otro motivo. Evitar esta situación ayuda a facilitar el proceso de compra.

Finalmente, y no por ello menos importante, la usabilidad de la pasarela ha de ser máxima. Tanto para el cliente como para el vendedor. Ambos han de saber cómo funciona, qué deben hacer para pagar o cobrar y cómo recibir ayuda en caso de error. Aportar una dirección de correo electrónico o un número de teléfono gratuito para solventar el problema permitirá no perder dinero y poder hablar personalmente con el cliente (algo que se valora positivamente).

Cuando se elija la alternativa más adecuada para cada caso, es esencial tener en cuenta que ha de integrarse con el resto de la página web correctamente. Es bastante habitual encontrar alternativas que llevan a la TPV para luego regresar a la página original. Este cambio parece no incidir en los niveles de conversión, pero en las tiendas que más venden en internet no se produce.

Así, es imprescindible contratar un servicio que se integre fácilmente con el CMS que se esté utilizando (Woocommerce, Prestashop, Magento, etcétera). El objetivo es conseguir que el tiempo de permanencia en la web de cada cliente sea el máximo posible. Apostar por una pasarela personalizada que permita añadir posibles opciones de compra complementarias o una oferta concreta ayuda a generar más beneficios.

Debe recordarse que el cliente busca en internet la inmediatez y el no tener que desplazarse a un comercio concreto. Que a la hora de pagar se le invite a que salga de la tienda para luego regresar no es algo que se lleve a cabo en un comercio físico. En uno virtual también es contraproducente.

Lo más adecuado es integrar una pasarela que permita realizar el pago de forma interna y sin salir de la página. El uso del mismo entorno aporta una sensación de seguridad. Para confirmarlo, sirva la siguiente estadística de 2019 sobre la tasa de abandono de pedidos:

Es decir, un 69 % de clientes deciden dejar de comprar algo por problemas que pueden solucionarse integrando mejor la pasarela en la web. Esto no significa que se oculten los datos relativos a la protección de datos o los sellos que confirman que la transacción será segura. Simplemente, se trata de apostar por el diseño y por la rapidez de uso.

Así, se confirma que la pasarela de pago online es el punto de contacto entre el cliente y el vendedor (tal y como sucede en una tienda física). Si al llegar a la caja de una tienda solo se encuentran problemas, lo normal es abandonarla. Para evitarlo, debe contarse con un sistema que facilite el proceso, que sea fácil de usar y que sea lo más seguro posible.

La combinación de los factores arriba indicados y otros que contribuyan a la personalización total para darle continuidad a la compra se convierte en el requisito más importante para elegir una pasarela de pago que contribuya al engagement y que mejore la imagen del negocio. Todo con el objetivo de convertir cada compra en un recurso que ayude a aumentar la clientela y, sobre todo, a confirmar la preocupación de cada negocio por ofrecer siempre las máximas facilidades a quien confía en su oferta comercial.